Muchos de los que usamos portátiles optamos por no apagarlos cuando tenemos que moverlo de un lado a otro, sino por ponerlos en modo suspensión, consiguiendo así que reanudar nuestro trabajo sea un proceso mucho más rápido. Claro que con Phoenix Instant Boot BIOS esto podría cambiar en un futuro próximo.
El fabricante Phoenix está mostrando esta tecnología en el Intel Developer Forum. Con ella se consigue que el ordenador empiece a arrancar el sistema operativo en menos de un segundo, por lo que el tiempo de espera se reduce prácticamente a lo que tarde el sistema operativo en estar listo.
En Windows 7 se han implementado, además, una serie de mejoras que reducen mucho el tiempo que tendremos que esperar para empezar a trabajar con él, lo que combina con Instant Boot BIOS hace que se consigan tiempos incluso por debajo de los 10 segundos, en un Lenovo T400s con disco SSD.
Con tiempos de arranque como estos, ¿quién quiere simplemente suspender cuando podemos apagar completamente el ordenador?
Vía | Engadget.
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