No es muy habitual que un teléfono móvil sea el co-protagonista de una película, y menos junto a Kim Bassinger, icono sexual de los noventa (o de los ochenta, no lo recuerdo bien). El título, aunque en inglés, lo dice todo: Cellular. La trama gira en torno a un joven (interpretado por Chris Evans) que recibe una llamada equivocada de una mujer secuestrada (Kim Bassinger). Para poder salvarla debe mantener la comunicación con ella y encontrarla antes de que se termine la batería de su móvil. El teléfono en cuestión es un Nokia 6600, que tiene una autonomía de cuatro horas de y un tiempo de espera de más de 10 días, afortunadamente para la protagonista. Pensaba que con un argumento así sería una película con poca enjundia, así que me ha sorprendido ver que la crítica cinematográfica del El País de hoy no la destrozaba. No os voy a animar a que vayáis a verla, porque yo no lo haré, pero nos gustará que nos enviéis vuestros comentarios si lo hacéis, y si alguno quiere hacer una breve reseña que nos la envíe para darle salida.
Sobre el Nokia 6600. Más información en Aecomo y en el sitio oficial de Cellular.
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