Apple sabe cómo hacer negocio. Eso nadie lo duda. Y si otra empresa, llámese xxxxxxxx, nos quisiera cobrar dos veces por lo mismo, ya se habría organizado una protesta mundial y terrible. Pero es Apple, y por lo tanto el que nos quiera cobrar otra vez por obtener el tono de llamada de una canción que ya hemos comprado, eso extraña menos.
El caso es que desde la industria de la música se sigue pensando cómo seguir vendiendo discos físicos a toda costa.
Lo último que se les ha ocurrido se llama Ringle, y es la suma del single de toda la vida y el tono de llamada de la actual.
Con un precio de unos 5 euros, llevaría el single (un tema) y los tonos de llamada asociados.
Lo que puede parecer una burrada es que si hay gente que se gasta hasta tres euros por comprar un tono en esos anuncios de televisión, ¿por qué no se los gastaría en un Ringle? Ahí estoy con Ángel.
Ahora ya sabes, para tener el último politono ya puedes ir a la tienda de discos. ¿Esto es avanzar?
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