Cuando el copyright se convierte en excusa para censurar una opinión en Internet

Cuando el copyright se convierte en excusa para censurar una opinión en Internet

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Cuando el copyright se convierte en excusa para censurar una opinión en Internet

¿Cuántas veces has recurrido a Internet para dejar una review de un restaurante, un producto o cualquier otro servicio? Puede que sea una opinión positiva, pero también negativa. ¿Y si de pronto el sitio web donde la has publicado te dijera que ha tenido que borrarla porque alguien ha reclamado que vulneraba sus derechos de autor? No es la primera vez que vemos cómo se abusa del concepto de copyright para hacer que alguien borre algo, y posiblemente no sea la última.

Hoy The Guardian se hace eco de un caso que demuestra cómo los internautas pueden hacer poco cuando la maquinaria de detección de plagio de Google se pone en marcha... aunque sea a partir de hechos erróneos. Annabelle Narey publicó en el foro Mumsnet una crítica a la empresa de reformas Buildteam tras no estar conforme con el trabajo prestado por ésta. Para su sorpresa, pronto Google se puso en contacto con el foro: alguien estaba reclamando que la crítica no era original, y el buscador amenazaba con desindexar el foro si éste no tomaba acción contra el texto.

¿En base a qué Google hacía esta amenaza? A que habían recibido una reclamación de alguien que había publicado el mismo fragmento de texto pero le había dado una fecha previa a la del contenido publicado originalmente (algo que no es difícil de hacer). Con este contenido, reclamaron a través de una solicitud DMCA que lo publicado en Mumsnet se había copiado de su web. Google, ante dicha petición, no lo dudó: no sólo excluyó el mensaje original de su buscador, sino que además se arriesgaba a penalizaciones adicionales.

Desde Mumsnet reconocieron haber recibido numerosas solicitudes de BuildTeam para borrar dicho tema, aunque no llegaron a proceder al borrado al considerar que era una simple opinión de una de sus usuarias. Cuando el asunto escaló y se metió Google de por medio, reconocieron no tener muchos recursos para hacer frente a un proceso legal que disputara esta reclamación y decidieron borrar el mensaje (que no el tema entero, donde otros usuarios también habían publicado experiencias negativas) con la esperanza de que Google volviera a indexarlo. Google se negó.

Alguien creó una web, copió el texto, le puso fecha anterior a la publicación original y con eso reclamó a Google, que no dudó en actuar: la opinión no aparece en el buscador

¿Quién publicó el mensaje y envió la solicitud a Google? Desde BuildTeam niegan estar relacionados, aunque algunos usuarios del foro especulan con que podrían haber contratado a alguien para que lo hiciera por ellos. El post y la reclamación aparecen firmados por un tal Douglas Bush y el dominio está registrado por Muhammed Ashraf, que supuestamente es de Pakistán. Todo muy extraño, pero lo cierto es que quien haya sido parece haber conseguido su objetivo: para Google, y por tanto de cara a potenciales clientes que investigan opiniones de BuildTeam antes de contratarles, la opinión negativa de Annabelle Narey no existe.

La "censura por copyright" no es nueva

Copyright 2

Aunque nos sorprenda, no es la primera vez que alguien recurre a las reclamaciones de infracción de copyright para intentar que una opinión negativa o contenido desaparezca del mapa. En Motherboard se hacían eco hace meses de otro caso bastante curioso: un dentista reclamó la propiedad de las reviews negativas que uno de sus clientes había publicado en Yelp. Y, como propietario, podía exigir su retirada.

¿Cómo era el dentista el propietario de los derechos de las opiniones de sus clientes? Sencillo: les hacía firmar un documento antes de ofrecer el tratamiento que así lo afirmaba. Esto, claro, no se sostuvo en el juicio posterior pero, aunque el juez le dio la razón al cliente, el caso todavía sigue abierto ya que el dentista desapareció del mapa.

Por aquel entonces, uno de los abogados de la Electronic Frontier Foundation ya avisaba del peligro y de cómo no era una novedad: "No es algo nuevo el que la gente intente usar el copyright como una forma de censurar lo que no les gusta". Además, añadía que "obviamente, las leyes del copyright no están hechas para que se impida a la gente publicar reviews online".

Dentistas, estudios de videojuegos y hasta políticos han usado, "supuestamente", esta técnica para intentar silenciar opiniones negativas

Un año antes, en 2013, el estudio de videojuegos Wild Games Studio decidía silenciar una opinión negativa plasmada en una review en YouTube. ¿Cómo lo hicieron? Denunciando que su autor había publicado imágenes del videojuego sin permiso. Paradójicamente, el propio estudio le había dado acceso a una copia del juego para que hiciera el análisis pero esto no evitó que después reclamaran.

Y no solo hablamos de casos en Reino Unido o Estados Unidos o casos sobre opiniones negativas: la propia EFF publicaba en 2014 una recopilación con otras actuaciones similares, incluyendo algunas dentro del ámbito político (como la de Brasil, en la que con reclamaciones de copyright consiguieron borrar vídeos críticos con uno de los candidatos a las elecciones). Ni es nueva ni seguramente será, por desgracia, la última vez que escuchemos hablar de la "censura por copyright".

Imágenes | Dennis Skley, Nancy Sims
En Xataka | Cuando el copyright mató la creatividad

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