A estas alturas, es difícil hacernos a la idea de que los coches autónomos nos lleven con seguridad a donde queramos, hay que tener mucha confianza en los algoritmos y el hardware que gobiernan los movimientos del vehículo, además de que tendríamos que ponernos en un escenario en el que todos los protagonistas fueran iguales.
La tecnología está ahí, y empresas como Google están dando pasos de gigante con sus pruebas reales, con sistemas de control de crucero basado en radares, cámaras que controlan los carriles disponibles, mapas tridimensionales de la carretera, tecnología laser, o reconocimiento digital de imágenes.
Google tiene una prioridad con su proyecto, el control de lo que pasa 360 grados alrededor de nuestro vehículo, para ello han desarrollado un sensor que rota (encima del coche) y registra un mapa tridimensional de 200 pies de diámetro a nuestro alrededor, podéis ver dicho coche pillado por las cámaras en el siguiente vídeo:
Simulando una intersección bastante poblada
Basándose en el concepto de Google, Peter Stone, de la Universidad de Texas, ha creado un modelo virtual en el que podemos comprobar cómo circularían vehículos autónomos en una intersección.
En la visión de Stone, hay un gestor de intersecciones autónomo, independiente a los vehículos y que daría información y coordinaría el paso de los mismos, podéis verlo en el siguiente vídeo:
Por poco, pero no se choca ninguno. Lo primero que llama la atención es la ausencia de semáforos, ¿para qué parar el vehículo un minuto si no encontramos tráfico en la intersección?
Está claro que se ganaría en eficiencia, pero como podéis ver en el vídeo, el cruce se convierte en un mar de vehículos que bien parece alguno de esos cruces de países asiáticos donde bicicletas, coches y motos circulan sin ningún tipo de control, pero en ese caso con más de un accidente diario.
Habrá que ir haciéndose una idea de lo que nos depara el futuro, y cuando estemos en ello, cruzar los dedos y confiar en que todos los sistemas implicados funcionen correctamente. Será muy comodo eso de llevar a un amigo al aeropuerto, o a los niños al colegio, sin salir de casa.
Creo que queda mucho para que la conducción autónoma sea una realidad desde el punto de vista de lo cotidiano, será interesante ver de que forma afectará a compañías de seguros, a los organismos de tráfico y a la industria en general. ¿Habrá que aprobar el carnet de conducir?
En Xataka | Coches que se conducen solos, lo último de Google
Vía | Necedades
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