Sinceramente no soy de usar fundas ni protectores en el teléfono, me gusta que el mismo sea resistente e intento ser lo más cuidado posible con ellos. Pero no hay que cerrar los ojos, últimamente las empresas fabricantes de teléfonos han estado intentando hacer más golosos este tipo de accesorios, buscando que veamos las cosas a través de pequeñas ventanas, presentan tapas activas, o meten pantallas auxiliares.
Afortunadamente hay gente que quiere dar un paso más e intenta revolucionar las posibilidades de algo tan simple como una funda con tapa, un buen ejemplo puede ser FlexCase. Los ingredientes introducidos en el accesorio lo hacen bastante interesante, otra cosa es que lo consigan llevar a buen puerto: tenemos pantalla de tinta electrónica de 4 pulgadas, es flexible, y podemos interactuar por ambas caras.
En realidad toda la gracia está en la tapa, allí nos encontramos con la citada pantalla, que nos hace de segunda ventana de interacción, una extensión de la principal. Y ahí es donde está la clave de FlexCase, en las posibilidades que nos presenta para interactuar con el teléfono al que está asociada. La tapa pasa a convertirse en un sistema de control de la pantalla del terminal.
La pantalla secundaria se convierte en un nuevo método de interacción del teléfono: sensible a la presión y a la flexión
Lo curioso es que la trasera de la tapa también reconoce esa presión, por lo que ambas caras nos sirven para estos menesteres. Ellos lo llaman "Dual-sided Touch".
Tendrá sentido cuando coloquemos la tapa detrás del teléfono, permitiéndonos realizar acciones con toda la pantalla principal a la vista, algo así como lo que Sony propuso con su última consola portátil. Todas estas cosas siempre es mejor conocerlas en vídeo:
Doblando la pantalla
El otro punto fuerte de sus capacidades está en la flexibilidad del conjunto tapa/pantalla, y es que cuenta con un sistema de reconocimiento que le permite ser sensible a las dobleces que ejerzamos, interpretándolas como acciones en el sistema principal.
El reconocimiento tiene un nivel de detalle bastante alto, siendo diferente en cada parte de la pantalla, no será lo mismo doblar la esquina derecha que la izquierda.
Los desarrolladores de la tecnología detrás de FlexCase nos invitan a pensar en tres modos principales de uso
Es obvio que no estamos ante un producto que se vaya a vender, es un compendio de tecnologías que relaciona sensores, algoritmos y pantallas. Juntos pueden convertirse en una nueva forma de interactuar en el móvil que puede interesar a un pez más gordo del mercado. Le seguiremos los pasos.
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